Es una
figura religiosa sagrada para dos de las religiones con mayor número de
adeptos, el budismo (fue fundador del dharma budista y primer
«gran iluminado») y el hinduismo, en el que se lo considera como la novena
encarnación del dios Visnú, de acuerdo con el Garuda-purana y la vigesimoprimera y penúltima según el Bhāgavata purāna hacia el siglo XI d. C..
Aunque
existen muchas leyendas, se concuerda en que fue un líder religioso conocido
como Siddhartha Gautamá. Vivió en una época de cambio cultural en que se
atacaban los procedimientos religiosos tradicionales de la India. Fue uno de
los reformadores que dio un impulso renovador en el ámbito religioso dhármico que se propagó más allá de las fronteras de la India y terminó
transformándose en una de las grandes religiones del mundo, el budismo.
DOTACIÓN
Buda
vivió a finales de lo que se conoce como periodo védico, esto es, cuando se fijó la composición del texto
sagrado hinduista Rig-veda (creado hacia el 1500 a. C.).
Sin
embargo, publicaciones recientes no aceptan esa datación y fijan su muerte
entre el 420 y el 368 a. C.
NACIMIENTO
La historia comienza alrededor del año 566 A.C.,
en el reinado de los Sakyas, en lo que hoy es la India y Nepal. En aquellos
años. Había muchos reinados. Era un pequeño país en lo que en la actualidad es
el Sur de Nepal que estaba gobernado por el clan de los Shakyas.
Siddhartha nació en el seno de una familia noble del clan de los Sakya. Su
lugar de nacimiento fue en Lumbiní, el reino de Kapilavatthu, una aldea del Terai (en el actual Nepal) que está a los pies de los montes Himalayas.
Según la tradición
oral, Śuddhodana Gautama, el padre de Siddhartha junto a su
hermosa esposa Mahamaya, era el rey que gobernaba el clan de los Sakya. Por este
motivo Buda también es conocido como SakyaMuni (śākya-muni, el ‘sabio de los
Sakya’).
Cuando
Mahamaya estaba esperando a su primer hijo, tuvo un extraño sueño en el que una
cría de elefante le bendecía con su trompa, lo que fue interpretado como un muy
buen augurio. Como era costumbre en aquel tiempo, cuando se aproximó el momento
del nacimiento para la reina Mahamaya, viajó hasta el reino de su padre para
dar a luz.
Pero
durante el largo viaje, comenzaron los dolores del parto. En la pequeña ciudad
de Lumbini, pidió a sus doncellas que la llevaran a un bosquecillo cercano en
busca de intimidad. Un gran árbol descendió una rama hacia ella para que le
sirviera de apoyo en el alumbramiento. Se dice que el parto se produjo casi sin
dolor alguno, a pesar de que el niño tuvo que ser liberado de su lado. Tras
esto, una suave lluvia cubrió a la madre y al niño para limpiarlos.
Se
dice que el niño nació completamente consciente. Podía hablar, y le dijo a su
madre que había venido a liberar a toda la humanidad del sufrimiento. Podía mantenerse
en pie, y caminó una corta distancia en cada una de las direcciones. Flores de
loto nacieron en cada una de sus huellas. Le pusieron por nombre Siddhartha,
que significa "aquel que ha logrado sus metas", “la meta perfecta”o
“la meta de los perfectos”. Por desgracia, Mahamaya murió a los siete días del
parto. Después de esto, Siddhartha fue criado por Mahaprajapati, la bondadosa
hermana de su madre.
Según
la tradición oral, poco después de su nacimiento fue visitado por el brahmán Asita, un asceta de gran reputación por su sabiduría y por sus dotes para
interpretar presagios. El sabio brahmán profetizó que Siddhartha llegaría a ser
un gran gobernante o un gran maestro religioso, lo que consternó a Śuddhodana,
que quería que su hijo siguiera sus mismos pasos y que un día le sucediera en
el trono. Es asi como Siddhartha fue custodiado en uno u otro de sus tres
palacios, por ello su padre lo protegió de la dureza de la vida, fuera de
palacio, para evitar que el hijo desarrollara su tendencia hacia lo espiritual,
y se le impidió que experimentara muchas de las cosas que la mayoría de los
muchachos consideraban corrientes. No se le permitió ver a los viejos, los
muertos, los enfermos o a nadie que se dedicara a las practicas espirituales. Pensó
que el mejor modo de evitarle la tendencia a la religiosidad consistía en
impedirle toda experiencia con el lado amargo de la vida, de modo que creó en
torno de él una vida llena de placeres y con el menor contacto posible con el
sufrimiento de la realidad.
Dice
la leyenda que Maia fue fecundada por un pequeño y bello elefante provisto de
seis colmillos que hirió delicadamente su regazo sin causarle dolor. Al nacer,
el pequeño Siddhartha habría aparecido ante su madre sobre un loto mientras una suave lluvia de pétalos caía sobre
ambos, y dijo: «Triunfaré sobre el nacimiento y la muerte y venceré a todos los
demonios que hostigan al humano».
Según
otra versión, Maia soñó una noche que un pequeño elefante con seis cuernos y
cabeza de color rojo rubí bajaba del cielo y entraba en su vientre por el lado
derecho. Ocho sacerdotes le explicaron a su esposo que el niño sería santo y
alcanzaría la sabiduría perfecta. Más tarde ella salió al jardín con sus
sirvientas y caminó bajo un árbol sala, el cual se inclinó. La reina se colgó
de una rama y miró a los cielos. En ese momento Siddhartha surgió de su lado.
Dice
también la leyenda, que cuando Gautamá nació recobraron la vista los ciegos, los sordomudos hablaron y una música celestial llenó el mundo.
INFANCIA Y JUVENTUD
La juventud de Siddharta fue plena, y destaco en
todo lo que hacía. Nada le faltaba, todo era perfecto dentro de su palacio.
Nunca tuvo necesidad de salir de su hogar. Siddhartha se convirtió en un joven
fuerte y hermoso. Como príncipe de una casta guerrera, se entrenó en las artes
de la guerra. Cuando llegó a la edad de casarse, ganó la mano de una hermosa
princesa de un reino vecino, venciendo a todos sus competidores en distintas
disciplinas. Se llamaba Yashodhara, y ambos contrajeron matrimonio a los 16
años de edad.
Los
primeros 29 años de la vida del príncipe Siddhartha Gautamá Buddha,
transcurrieron completamente ajenos a toda actividad espiritual, siempre vivió
con su familia. Los detalles de la infancia y juventud de Siddhartha narran una
vida rodeada de enorme lujo y comodidad. Recibió la mejor educación y formación
posibles en su tiempo. Pero es en la edad de 19 años donde se casa con su prima Yashodhara, sigiendo las costumbres vigentes de la epoca, como asi mismo a la edad de 7 años como son las costumbres de la epoca se dedico al estudio de las artes civiles y militares.
El niño mostro desde su infancia un gran interes, una gran afinidad e identificación con la naturaleza y con todos los seres vivos...
El niño mostro desde su infancia un gran interes, una gran afinidad e identificación con la naturaleza y con todos los seres vivos...
Siddhartha
comenzó a sentir curiosidad por conocer cómo eran las cosas en el mundo
exterior y pidió permiso a su padre para satisfacer su deseo. Śuddhodana
accedió, pero preparó la salida de su hijo ordenando que despejaran las calles
de toda visión que pudiera herir la sobreprotegida conciencia del príncipe. No
obstante, sus cuidadosos arreglos fracasaron pues Siddhartha, aclamado por la
multitud a su paso por las calles, no pudo dejar de percibir el dolor bajo sus
formas más agudas, por primera vez se percató de la vejez, enfermedad y muerte.
BUSQUEDAD ESPIRITUAL
Siddhartha
Gautamá representa a la
perfección el concepto de «búsqueda espiritual»
según las antiguas creencias, sobre todo de naturaleza oriental. Es decir, el
incansable esfuerzo interno o la catarsis que conduce a la unión liberadora con la divinidad o nirvana y por la que todos los seres humanos
tarde o temprano se verán obligados a realizar (autorrealización) para alcanzar algún día la iluminación, después, eso sí, de experimentar las
necesarias y aleccionadoras reencarnaciones.
Asimismo,
la figura de Siddharta convertido finalmente en el Iluminado (o Buda) viene a expresar la idea mística de que el camino hacia la propia luz y por consiguiente la obtención de la
paz interior implica enorme sacrificio y suele comenzar con una provocadora e
inquietante duda.
Hasta que un día escucho una melodía que no
conocía. Esto le despertó curiosidad, y comenzó a buscar de dónde provenía. Era
una melodía diferente que hablaba de pueblos lejanos. Siddharta nunca había
salido de su palacio, y al darse cuenta que existía un mundo fuera de él, se
propuso conocerlo.
ABANDONO
EL HOGAR
Siddhartha pidió conocer las afuera de su palacio,
y su padre organizo su salida, para que esta fuese perfecta. La gente lo aclamaba
con gran alegría.
Todo estaba bien hasta que en la multitud aparecieron dos
ancianos. Siddhartha quedo impactado, nunca vio gente así. Pregunto a sus
cercanos para saber quiénes eran.
Gracias a estos ancianos Siddhartha conoció la
vejes, y que todas las personas llegaran a envejecer tarde o temprano.
Siddhartha quedo muy impactado. Siddhartha volvió a sorprenderse al ver gente
enferma, así descubrió que la enfermedad nos llegara tarde o temprano a todos.
Siddhartha necesitaba conocer más así que se
adentró en la ciudad. Esta era la primera vez que conocía a su gente y las
condiciones en que ellas vivian. Muy afectado Siddhartha se acerco a un rio y
allí descubrió algo que lo afectaría aun
más… allí Shiddartha conoció la muerte, y se dio cuenta que todos moriremos,
tarde o temprano.
El sufrimiento la enfermedad, la vejez y la
muerte fueron descubrimientos que cambiaron a Siddhartha para siempre.
La
historia de Barlaam y
Josafat nos cuenta que el
descubrimiento de la vejez, la enfermedad y la muerte fue traumático para
Siddhartha. Se dio cuenta de que también él estaba sujeto al mismo sufrimiento
y su ánimo se tornó sombrío, pues se preguntaba cómo alguien podía vivir en paz
y felicidad si esto era lo que le deparaba la vida.
Siddhartha
vivió como un príncipe hasta los 29 años; luego abandonó su hogar, Decidido a
encontrar las respuestas a sus inquietudes Siddhartha abandono su palacio y su
vida de lujos y se desprendió de sus ricos ropajes para adentrarse al bosque y
unirse a un grupo de ascetas, dejando atrás a su esposa Yasodhara y a su hijo, le dio el callo a Chandaka que era
su escudero acrual diciéndole que se regrese al palacio. Partió con la cabeza
rapada y ataviado con un vestido amarillo de itinerante, sin dinero ni bienes
de ninguna clase, en busca de la iluminación. Más tarde descubrió que todo
extremo es malo.
En
esta nueva salida al exterior, el príncipe vio a un anacoreta, un monje mendicante, del cual se sintió impresionado
por su carácter apacible. Decidió adoptar, también él, la vida de los monjes
que vivían en extremo ascetismo, pasando antes unos años como mendigo.
Estudió por un breve período con dos de los más
famosos gurús de aquellos tiempos, pero encontró vacías sus prácticas.
Entonces comenzó a practicar la austeridad y la
automortificación junto a un grupo de cinco ascetas. Durante seis años,
practicó. La sinceridad y la intensidad de su práctica eran tan sorprendentes
que, muy pronto, los cinco ascetas se convirtieron en seguidores de Siddhartha.
Pero las respuestas a sus preguntas no aparecían. Redobló sus esfuerzos, rechazando el agua y la comida, hasta
llegar a estar a las puertas de la muerte.
Muchos
años vivió como asceta mortificando su cuerpo, y comiendo casi nada. A pesar de
su gran esfuerzo Siddhartha no encontraba aun las respuestas que buscaba. Un día, una campesina llamada Sujata vio a este
monje famélico y se apiadó de él. Le rogó que tomara un poco de su arroz con
leche.
Siddhartha descubrió entonces que estas prácticas extremas no le estaban
llevando a ninguna parte, y que de hecho sería mejor encontrar una vía
intermedia entre los extremos de una vida llena de lujos y la vía de la
automortificación. Así que comió, bebió y se bañó en el río. Los cinco ascetas
le vieron y concluyeron que Siddhartha había dejado la vida ascética y tomado
el camino de la carne y, por tanto,
lo abandonaron.
EL CAMINO MEDIO Y LA ILUMINACIÓN (Nirvana)
Siddhartha
escucho un día a un músico en un bote diciendo: “si la cuerda está muy floja
se soltara, y si la cuerda está muy tensa se cortara”. Así
Siddhartha descubrió el camino medio.
La
verdad del Camino Medio es que los
extremos no conducen a nada positivo…, por lo que Siddhartha decide recuperar
su cuerpo para así encontrar sus respuestas.
Siddhartha se dio cuenta entonces de que un camino
medio de moderación que evitara los extremos de la mortificación y de la
indulgencia lograba incrementar sus energías, su lucidez, y su capacidad de
concentración. Así que con este hallazgo, comió algo de comida y se sentó bajo
una higuera de una especie sagrada en la India con la promesa de no levantarse
hasta hallar la solución que esperaba. Esto ocurría en la localidad de
Bodhgaya, cerca de Varanasi (Benarés). Actualmente sigue siendo el sitio más
sagrado de peregrinación para todos los budistas.
Los
ascetas abandonaron a Siddhartha cuando él se alimentó, pensando que el havia
olvidado su camino. En cambio Siddhartha empezó a meditar sin irse a los
extremos. De esta forma Siddhartha tuvo que enfrentar tentaciones y miedos. Asi
le empezaron a aparecer muchas tentaciones de todo tipo que le servían para
ponerlo a prueba.
Al
final de su periplo Siddhartha caminó en un lugar llamado Bodhgaya, en el estado indio Bihar, hasta sentarse bajo la sombra de un árbol llamado bo o bodhi
(ficus
religiosa),
considerado el árbol de la sabiduría.
Una
noche de luna llena decidió no levantarse hasta que hallara la respuesta al
sufrimiento. Pasó varias semanas debajo de este árbol. Como empezó una terrible
tormenta, de debajo de las raíces del árbol surgió Muchilinda, el rey de los nagas (serpientes), se enroscó
alrededor de Gautama y lo cubrió con su caperuza. Finalmente Gautamá tomó
conciencia de que ya se había liberado definitivamente, supero todos los
obstáculos alcanzo su despertar o iluminación un estado de completa felicidad y
sabiduría asi Siddhartha se convirtió en un “ser despierto o un iluminado”.
Comprendió
las Cuatro
Nobles Verdades. Ya no
pesaba sobre él la ilusión del falso yo: su verdadero ser estaba más allá de las dualidades del aferramiento y la
repulsión; había trascendido el espacio y el tiempo, la vida y la muerte. Comprendió
que nunca más volvería a renacer, que había roto el eterno girar de la rueda del samsara. Esto es el nirvana.
Contando
para entonces 35 años, según la leyenda, Siddhartha despertó de sus meditaciones
como un Buda (‘despierto’, ‘iluminado’) y siguió sentado bajo el árbol bodhi
durante cierto tiempo, disfrutando de la dicha de la renunciación, de la
liberación. Después empezó a enseñar sobre el nirvana a quien le oyera;
fundando lo que se conoce en Oriente como Buddha-Dharma (la enseñanza del
buda); en occidente se conoce más comúnmente como el budismo.
Se dice que el malvado Mara intentó evitar este
gran acontecimiento. Primero trató de asustar a Siddhartha con tormentas y
escuadrones de demonios. Siddhartha permaneció en calma. Luego envió a sus tres
hermosas hijas para tentarle, pero fue en vano. Por último, trató de atrapar a
Siddhartha en su propio ego haciendo una llamada a su orgullo, pero esto
también fracasó. Después de haber superado todas estas tentaciones, Siddhartha
tocó el suelo con una mano y le pidió
a la Tierra que fuera su testigo.
Luego
de 40 días de disfrutar de su logro, se propuso a enseñar al que quisiese lo
que havia alcanzado, y como podemos lograrlo nosotros, Le parecía que
este conocimiento que había adquirido era muy difícil de comunicar a los demás.
La leyenda cuenta que Brahma, el rey de los dioses, convenció a Buda para que
enseñara, diciéndole que quizá algunos de nosotros solo tengamos una pequeña
mota en nuestros ojos y que podamos despertar con solo oír su historia. Buda
aceptó enseñarla. Y asi los ascetas
se convirtieron en sus primeros alumnos…
MAESTROS
En su
camino, Siddharta aprendió de la mano de cuatro diferentes maestros. Con ellos
aprendió diferentes técnicas de meditación y logró altos estados de conciencia.
En esencia, las distintas ideas que examinó Siddharta intentaban redefinir la
unión del individuo (Atman) con un
absoluto (Brahman) para así lograr la liberación.
Pero a pesar de sus grandes logros con estas prácticas, no encontró en ellas
satisfacción para sus preguntas. Entonces, en un intento por doblegar
totalmente al mundo sensorial, Siddharta probó a someterse a austeridades tan
extremas que casi ocasionaron su muerte, pero aun así tampoco encontró solución
a su problema. Por esto decidió investigarlo de una manera nueva y diferente.
Aprendió
dos cosas de suma importancia: primero, que el ascetismo extremo no conducía a
la liberación total, sino que era preciso algo más; y segundo, que, alcanzado
cierto punto, ningún maestro era capaz de enseñar nada más. Siddhartha partió
decidido a no seguir buscando fuentes externas de sabiduría, sino a
encontrarlas dentro de sí mismo.
Una versión
mítica de esta etapa de su vida nos dice que Siddhartha, en sus extremas
prácticas de ascetismo, después de algunos días sin comer ni beber agua, pocos
minutos antes de su muerte, escuchó a un maestro que estaba enseñándole a una
niña a tocar la cítara. Dicho maestro le dijo que si la cuerda
estaba muy floja no sonaría, pero si la cuerda de la cítara se encontraba muy tensa se rompería: la cuerda debía estar en su justa
tensión para que pudiera dar música y armonía.
En ese
momento Siddharta comprendió el camino del medio: tanto el ascetismo extremo como la vida de
placeres del palacio eran dos extremos, y la verdad se hallaría en la justa
medida entre el placer exacerbado y el ascetismo extremo.
EL PRIMER SERMON
En Sarnath, cerca de Benarés, a unas cien millas
de Bodh Gaya, se cruzó con los cinco ascetas con los que había practicado
durante tanto tiempo. Allí, en un parque de ciervos, dio su primer sermón, llamado "el
arranque de la rueda de la doctrina". Les explicó las Cuatro Nobles
Verdades y el Óctuple Sendero. Ellos se convirtieron en sus primeros discípulos
y el comienzo del Shangha o comunidad de monjes, es aquí donde BUDA se dedica
aenseñar el DHARMA.
El rey Bimbisara de Magadha, después de oír las
palabras de Buda, le cedió un monasterio cerca de Rahagriha, su capital, para
que fuera usado en la temporada de lluvias. Ésta y otras generosas donaciones
permitieron a la comunidad de conversos continuar sus prácticas a través de los
años, y le dio a mucha más gente la oportunidad de escuchar las enseñanzas de
Buda.
Con el paso del tiempo, los miembros de su
familia se aproximaron a él, incluidos su esposa, su hijo, su padre y su tía.
Su hijo se hizo monje y se le recuerda especialmente por un sutra basado en una
conversación entre padre e hijo sobre los peligros de la mentira. Su padre se
convirtió en un seguidor laico. A causa de la tristeza que le produjo la
partida de su hijo y su nieto hacia la vida monástica, le pidió a Buda que
creara la regla de que un hombre debería tener el permiso de sus padres para
convertirse en monje. Buda aceptó.
Su tía y su esposa le pidieron entrar a formar
parte del Sangha, que originalmente estaba compuesto sólo por hombres. La
cultura de aquel tiempo situaba a las mujeres muy por debajo de los hombres en
importancia, y en un principio pareció que permitir a las mujeres entrar en la
comunidad debilitaría a ésta. Pero Buda las aceptó, y su tía y su esposa se
convirtieron en las primeras monjas budistas.
Buda decía que no importaba el estatus que las
personas tuvieran en el mundo, ni su pasado, su riqueza o su nacionalidad.
Todos eran capaces de iluminarse, y todos eran bienvenidos en el Sangha. El
primer monje budista que fue ordenado, Upali, había sido barbero, pero fue
situado por encima de otros que habían sido reyes, ¡tan solo porque había hecho
sus votos antes que ellos!
La vida de Buda no estuvo libre de decepciones.
Su primo Devadatta era un hombre ambicioso. Como converso y como monje, sentía
que debía otorgársele mayor poder en el Sangha. Se las arregló para influir en
algunos monjes con una llamada al extremo ascetismo. Incluso llegó a conspirar
con un rey local para asesinar a Buda y tomar el control de la comunidad
Budista. Por supuesto, fracasó.
MUERTE
Buda alcanzó la iluminación a los 35 años de
edad. Estuvo enseñando por todo el noroeste de la India durante 45 años. A los
80 años le dijo a su amigo y primo Ananda que les abandonaría a todos pronto. Y
esto se hizo realidad en Kushinagara, a menos de cien millas de su tierra
natal, donde comió unos alimentos en mal estado y se puso muy enfermo. Entró en
una profunda meditación en un bosque y murió. Sus últimas palabras fueron...
"Todas
las cosas creadas son inestables; esforzaros con atención".
TRAS SU MUERTE
El rey
Asoka (siglo III a.
C.) difundió la religión
budista por todo su imperio, llenando el norte de la India con templos y
monasterios budistas.
El
budismo prácticamente desapareció de la India hace mil años. La enseñanza se
expandió hacia el sur a Sri Lanka y el sudeste de Asia, donde la forma
theravada de budismo aún sigue floreciendo. También se difundió al norte al
Tíbet, China, Mongolia y Japón. Las formas majaianas de budismo se practican en estos países. En el
siglo XX el budismo empezó a perder adeptos en Oriente, mientras que se ha
difundido en Occidente.
BUDA EL CONCEPTO
El
término proviene del sánscrito बुद्ध, buddha:
‘inteligente’, ‘iluminado’. Etimológicamente deriva del verbo budh: ‘despertar, prestar
atención, darse cuenta, entender, recuperar la conciencia después de un
desmayo’. Según el budismo, Buda es la denominación que reciben aquellos
individuos que han realizado su naturaleza bodhi.
Siddharta
Gautamá, Buda, se considera «el Buda de nuestra era», uno de los budas
principales que definen eras cíclicas de enseñanza y olvido del dharma (la verdad; la naturaleza de la realidad, de la mente, de la aflicción del
ser humano y del camino correcto para la liberación).
Debido
a ciertas malas interpretaciones muy comunes, se debe enfatizar que Buda no es Dios. Esto no solo lo aseguró el mismo Buda Gautamá, sino que la misma cosmología
budista hace esta
distinción al afirmar que el estado del budha únicamente lo pueden lograr los
seres humanos (pero no se limita a esta humanidad en particular), en quienes
reside el mayor potencial para la iluminación.
Siddhartha
Gautamá también afirmó que no existen intermediarios entre la humanidad y lo
divino. Devas (dioses o ángeles), humanos y demonios se
rigen por el karma, cuyas leyes dictan que la compasión y el amor
por la existencia generan provecho tanto para las demás criaturas como para el
que las ejerce, purificando su karma.
El
Buda es tan solo un ejemplo, un guía y un maestro para aquellos seres que deben
recorrer la senda por su cuenta, lograr el despertar espiritual y ver la verdad
y la realidad tal como son. El sistema budista de filosofía y práctica
meditativa no fue una revelación divina, sino más bien el entendimiento de la
verdadera naturaleza de la mente y tal entendimiento puede ser descubierto por
cualquiera.
Es el
adentrarse en la realidad lo que se logra al comprender que la ignorancia puede
eliminarse.
BUDA EN OTRAS RELIGIONES
En
general, Buda es considerado una de las figuras más importantes de la historia
religiosa junto con otros reformadores religiosos, solo por detrás de Jesucristo. Si bien Buda es la figura central del budismo, no es exclusiva de él.
- Para los hindúes, Buda es la novena y penúltima —y la más reciente— encarnación de Visnú, precedida por Krisná y seguida supuestamente
por Kalki (dentro de 0,4 millones de años), es decir, es un avatar del hinduismo.
- El caodaísmo lo considera uno de los profetas de Dios.
- La teosofía, como otras escuelas
esotéricas, consideran a Buda uno
de los mayores iluminados.
- Los budistas chinos le adoran como El Fo, dirigiéndose a él como Fot-tchou
- El maniqueísmo lo incluía entre los predecesores de Mani al lado de Moisés, Jesús y Zoroastro
- Para el bahaísmo, Buda es una de las nueve representaciones de Dios sobre la
Tierra.
- Los raelianos lo consideran uno de los supuestos clones extraterrestres destinados a guiar a la humanidad.
- La cienciología lo considera, junto con Jesús, uno de los clear,
aquellas personas que han logrado ponerse en contacto con su alma extraterrestre
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