A
menudo, las personas que conocen el Budismo de Nichiren por primera vez, se
sorprenden por la postura de éste hacia los deseos, la cual parece contradecir
la imagen prevaleciente del Budismo, ya que para muchos, éste se asocia con el
ascetismo y en efecto, hay muchas escuelas y tradiciones que enfatizan la
necesidad de eliminar los deseos y cortar con todos los apegos.
Una
vida controlada por los deseos es miserable. En las escrituras Budistas se
simboliza ese estado de vida con "demonios hambrientos" con cabezas
gigantes y enormes bocas pero con estrechísimas gargantas que les hacen
imposible satisfacer su hambre. El horror que, deliberadamente provocan estas
imágenes, lo cultivó el Buda Shakyamuni debido a la necesidad de separar a la
gente de sus apegos a las cosas, incluyendo a la existencia física. Shakyamuni
trataba de decirles que la felicidad real no estaba aquí y que los apegos
terminarían por perderlos.
Las
tendencias profundamente arraigadas a los apegos y los deseos (en Japonés,
bonno) se traducen al Inglés como "earthly desires" (en Español:
deseos mundanos). Pero, ya que estas tendencias también incluyen el odio, la
arrogancia, la desconfianza y el miedo, la traducción "deluded
impulses" (en Español: motivos o impulsos engañosos), podría resultar en
algunos casos más apropiada.
¿Es posible eliminar realmente tales deseos y
apegos?
Después de todo, los apegos son sentimientos humanos naturales y los
deseos son un aspecto vital y necesario de la vida.
El deseo, por ejemplo, de
protegerse uno mismo y a los seres amados, ha sido la inspiración para un
amplio campo de progreso en la creación de grupos sociales de apoyo. Asimismo,
el deseo de entender el lugar de la humanidad en el cosmos, ha llevado al
desarrollo de la filosofía, la literatura y del pensamiento religioso.
En
este sentido, eliminar todos los deseos no es posible ni, de hecho, deseable.
Si nos despojamos por completo de los deseos, podríamos terminar socavando
nuestra voluntad de vivir, tanto individual, como colectivamente.
Las
enseñanzas de Nichiren enfatizan la transformación, en lugar de la eliminación,
de los deseos. Los deseos y los apegos son vistos como combustible en la
búsqueda de la iluminación. Él dice: "Ahora, Nichiren y los que invocan Nam-myojo-rengue-kyo...
queman la leña de los deseos mundanos y contemplan el fuego de la sabiduría
iluminada..."
En el mismo tenor, el Sutra del Valor Universal establece:
"Aun sin extinguir sus deseos mundanos o negando los cinco deseos, ellos pueden
purificar todos sus sentidos y erradicar todas sus faltas."
El enfoque de
Nichiren tiene el efecto de popularizar, humanizar y democratizar el Budismo.
En otras palabras, al hacer de las aspiraciones, los sueños y frustraciones de
la vida diaria el "combustible" para el proceso de la iluminación,
Nichiren abre el camino de la práctica budista a aquellos que habían sido
tradicionalmente excluidos, debido a la exigencia de retirarse del mundo a la
meditación; aquellos, por ejemplo, quienes desean continuar jugando un papel
activo en el mundo.
De
tal manera que no es coincidencia que esta actitud hacia los deseos ocupe un
lugar central en la tradición del Budismo Mahayana y que enfatice el papel de
los practicantes laicos. Para las personas que viven en medio de los cambios
constantes y la tensa realidad, éstos desafíos precisamente, son los estímulos
más efectivos para dedicarse a la práctica budista, en lugar de un objetivo
abstracto de "iluminación" que requiera de cortar con todos los
deseos y apegos.
Sobreponerse a los problemas, realizar sueños y metas
largamente acariciados:
Esta es la clase de cosas cotidianas de las cuales
obtenemos un sentido de realización y felicidad. Se ha enfatizado la
importancia de no cortar nuestros apegos, sino de entenderlos y, a final de
cuentas, usarlos.
Las
experiencias de la fe de los practicantes describen eventos y cambios que
parecen a simple vista estar enfocados hacia la parte externa y material de la
vida. Pero tales "beneficios" son sólo una parte de la historia.
El
Budismo divide los beneficios de la práctica en "conspicuos" e
"inconspicuos." Los beneficios de obtener un nuevo trabajo, vencer
una enfermedad, un matrimonio exitoso y así sucesivamente, no están separados
de un profundo y concienzudo proceso de auto-reflexión dirigido a una
transformación interna.
El grado de motivación generada por los deseos, puede
aportar tal intensidad a nuestra práctica, que finalmente se obtiene la
recompensa espiritual. Bonno soku bodai significa literalmente "Los deseos
mundanos son iluminación" y el concepto conforma una tesis clave en el
Budismo de Nichiren. A través de nuestra práctica budista, aun el más mundano y
engañoso impulso puede ser transformado en algo generoso y noble y, nuestros
deseos, enfocados de forma natural en nosotros mismos, se extienden a otros
deseos concernientes a nuestras familias, amigos, comunidades y, finalmente, al
mundo entero.
En
esta forma, la naturaleza de los deseos se transforma gradualmente, de deseos
por lo material y físico, a deseos orientados más espiritualmente, para llevar
una vida más plena.
"Creo en la existencia de otra clase de deseos humanos:
A esto le llamo el deseo fundamental y, tengo la convicción de que este deseo
fundamental, es la fuerza que impulsa activamente a todos los otros deseos
humanos hacia la creatividad. Es la fuente de toda la energía impulsora
inherente a la vida; también es el anhelo de unir la propia vida con la vida
del universo y obtener su energía vital."
Welcome to Betway Casino | Play with a bonus up to C$150
ResponderEliminarPlay クイーンカジノ on the best online casino and enjoy all the benefits of 카지노 Betway casino and the chance to win huge betway login bonuses. Enjoy the best slots games at Betway Casino.